lunes, 8 de agosto de 2016

La jaula

Le contaremos a la gente que el jefe enemigo es sucio, incoherente, envilecido y brutal, más animal que humano... Iremos a por él y cuando lo capturemos lo meteremos en una jaula con unos harapos, sin posibilidad de lavarse, sin retrete y sin utensilios para comer. Al cabo de unas semanas se lo mostraremos a nuestra gente, y con bastante certeza estará sucio, actuará de forma incoherente, envilecida y embrutecida, y según vaya pasando el tiempo este comportamiento irá a más. Entonces podremos decirle a todos: “¿lo veis?, ya os lo dijimos hace mucho”.




No hay comentarios:

Publicar un comentario